
De la Redacción
La comunidad de San Gabriel Chilac vive horas de luto e indignación tras el asesinato de tres integrantes de una familia dedicada a la elaboración y venta de ropa típica: Jesús Ortega Flores (“Chucho”, 56 años), su esposa Alejandra Romero Martínez (60 años) y su hijo Omar Ortega Romero (“Gomi”, 36 años).
El lunes por la noche, mientras viajaban en una Ford Lobo color arena rumbo a Tlaxcala para ofrecer sus artesanías, fueron interceptados por un comando armado a la altura de Zitlaltepec. Los delincuentes, que se trasladaban en al menos dos vehículos, les cerraron el paso y los amenazaron con armas de fuego.
Jesús, quien manejaba, intentó escapar acelerando, pero la camioneta terminó chocando violentamente contra un tractocamión. El impacto fue letal: los tres perdieron la vida en el lugar. Solo una persona más que los acompañaba sobrevivió y fue trasladada grave a un hospital.
Transportistas de la zona denuncian que la carretera federal Amozoc-Perote y la autopista Puebla-Córdoba se han convertido en focos rojos de asalto a mano armada, con bandas que operan con total impunidad por la ausencia de vigilancia. “Es el pan de cada día”, coinciden choferes que transitan diariamente.
Entre velas y lágrimas, San Gabriel Chilac exige justicia y clama a las autoridades estatales y federales que investiguen a fondo y capturen a los responsables de este triple homicidio que enluta a una de las familias más queridas por su trabajo artesanal y su aporte a la tradición textil de la región.