Ray García G.
Diario El Mundo
Rogelio Flores Rivera es un menor de edad que se unió a los brigadistas voluntarios para combatir el incendio en el cerro de Tenango y de la Carbonera, y aunque en esta actividad sufrió lesiones en las manos no desiste de combatir el incendio.
Tiene 17 años y es vecino de Río Blanco, se sumó a las labores de combate desde el lunes en la comunidad de Tenango, y el martes decidió prestar su labor en el cerro de La Carbonera que pertenece a Nogales.
"Al ver todo eso (incendio) que estaba muy feo no que quise quedar de brazos cruzados", expuso.
El martes se lesionó su mano izquierda con una piedra, estaba abriendo brechas cortafuego y la tierra no le favoreció en la montaña, se iba a caer y se agarró de una piedra afilada que le generó una herida en la palma de su mano.
Pero así con lesiones continúa, lamentablemente se desprendió una piedra del cerro donde caminaba y se cayó generándole otra herida en la mano derecha.
Indica que ha estado cerca del fuego hasta unos cinco metros, ahí el aire está muy caliente, y sienten el riesgo que enfrentan.
Como Rogelio otros cinco brigadistas en La Carbonera han sufrido accidentes como caídas e incluso que se han golpeado con su propio machete pero siguen adelante, en las tareas del combate al fuego.
Otro brigadista resultó lesionado debido a que hay personas que están apuntando con rayos láser al cerro, el rayo le pegó en la vista, lo cegó y lamentablemente se cayó.
Lamentablemente al ser voluntarios no llevan todo el equipo adecuado para protegerse como guantes de carnaza, botas y casco. La mayoría solo sube con herramientas de labranza y un cubrebocas.
Rogelio en su caso no cuenta con seguro; actualmente estudia el bachillerato en el sistema escolar abierto, pero desea ser Marino.