Andrea Castillo
Durante el aseguramiento de Verónica Inés Barbosa Pérez, mujer que halló un teléfono celular e intentó devolver en Tehuacán, fue torturada, tanto física como psicológicamente, además dio a conocer que teme por la seguridad de ella y de su familia, pues aunque ya fue liberada, sigue bajo investigación.
La tarde de este martes, Verónica Inés Barbosa Pérez, hizo un recuento sobre lo ocurrido la noche del pasado viernes, señaló que precisamente caminaba a la altura de las canchas del fraccionamiento Santa María en Tehuacán, cuando se percató de que el teléfono estaba en el piso, por lo cual lo recogió y se dispuso a devolverlo.
Fue a través de redes sociales que la mujer empezó a publicar la imagen del teléfono, sin embargo no tuvo éxito.
La hija de Verónica ordenó al dispositivo que se comunicara con la mamá del propietario, diciendo la siguiente frase "Siri, comunícate con mamá" y automáticamente el dispositivo se enlazo con la madre, con quien acordaron que le volvería a llamar para pactar la entrega del dispositivo, pero eso no ocurrió.
Durante la madrugada del sábado, la familia notó que afuera de su casa en el fraccionamiento Rancho Grande, había varios elementos de la Policía Municipal, incluso se acercaron a llamar a su puerta y preguntaron si de ahí habían emitido algún llamado a través del 911, la respuesta fue negativa, pues desconocían lo que les preguntaban los oficiales.
Al día siguiente, cuando Verónica se dirigía a su trabajo, notó que afuera de su casa había varios elementos y pensó que posiblemente habían asesinado a alguien, ya que era un gran número de uniformados, posteriormente se dirigió a su trabajo y notó que llegaron varias patrullas y uniformados, fue cuando ingresaron a su trabajo derribando un zaguán, ahí dijo sentirse intimidada y después le preguntaron por un teléfono, ella contestó que había encontrado uno y que lo había estado intentando devolver, pero sin éxito.
Los elementos la llevaron hasta su casa para que su hija se comunicara con la mamá del propietario del dispositivo, ya que Verónica les explicó que ya habían tenido contacto con la familia, sin embargo no la encontró y se la llevaron asegurada con una bolsa de plástico en la cabeza a un predio, según la afectadas, este se ubica en San Marcos Necoxtla, en ese lugar la golpearon varias veces en el estómago, de tal manera que al recibir el impacto, se quedara sin aire.
Después, fue llevada a la ciudad de Puebla, ahí fue entregada a la FGE, al llegar, ella preguntó si la seguirían golpeado, sin embargo una de las custodias dijo que ya no.
"Me pusieron una bolsa de plástico y cuando me pusieron la bolsa me golpearon en el estómago para que se me fuera el aire y cuando yo quería aire, ya no lo tenía y yo dije aquí ya no voy a aguantar, me van a matar, pero eso sí, no me van a sacar nada, porque no había nada", destacó Verónica.
Hizo hincapié en que después de que fue asegurada perdió su trabajo debido a que los elementos derribaron el zaguán de lugar en donde laboraba y a su jefa no le importó otra cosa más que recuperar el bien que se le dañó, además la familia de Verónica acudió a buscarla a su trabajo, pero su patrona se negó a darles mayor información debido al daño que había recibido en su vivienda.
También, destacó que recuperó su libertad gracias a que su familia y demás instancias se movilizaron, ya que la familia del supuesto secuestrado no dio ningún tipo de versión, a pesar de que sí hubo una comunicación con ellos.
Por último, hizo un llamado atento a? próximo gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, para que revise con con qué elementos va a empezar su gobierno, ya que lo que ella vivió, lo viven todos los días las personas que son aseguradas y que en la mayoría de los casos, son inocentes.