Maribel Linares M.
Transportistas del servicio de taxi siguen padeciendo la inseguridad, especialmente el robo de autopartes, una situación que no han podido frenar.
En los últimos dos meses, se ha registrado un promedio de más de 10 atracos en unidades, según señaló Fermín Merino, representante del gremio.
Merino comentó que las zonas de la ciudad donde han sido víctimas son variadas. Basta con que dejen estacionadas las unidades para que, al regresar, les falte la batería, faros, rines o equipo de sonido.
En cuanto a las pérdidas que este tipo de hurtos genera, dijo que son diversas y van desde los 3,000 hasta los 10,000 pesos. Por ejemplo, una batería de auto puede costar 3,000 pesos, siendo este el artículo que más les quitan. Incluso en los estacionamientos de los centros comerciales han padecido esta situación.
Finalmente, Merino expresó su esperanza de que esta situación mejore, aunque hasta el momento, como gremio, no han visto grandes avances. Aunque en un principio se quejaban del robo de unidades, ahora lo que les preocupa son los atracos para quitarles piezas de los vehículos.